miércoles, 26 de octubre de 2011

Modificación de la casa SCHRÖDER

CASA SCHRÖDER

 

Esta casa fue proyectada por Rietveld en 1924, en colaboración con su clienta Truus Schröder, una joven viuda que deseaba una casa para ella y sus tres hijos pequeños de 12, 11 y 6 años de edad. La casa se construyó ese mismo año en un solar que para entonces estaba ubicado en las afueras de Utrecht. La casa se desarrolla en dos plantas y su cubierta es plana, la planta baja alberga un vestíbulo, un pequeño estudio, un estudio-taller, una cocina-comedor y la habitación de servicio. La planta alta es abierta y flexible; puede dividirse mediante particiones correderas de madera para crear un distribuidor, tres dormitorios, un baño y una sala estar. Las particiones tienen partes con bisagras que funcionan como puertas.

Aunque la casa tiene el aspecto de un edificio moderno de hormigón armado, de hecho se construyó utilizando una combinación de materiales modernos y otros relativamente tradicionales. Los cimientos están formados por bloques de hormigón, con vigas de hormigón armado apoyados sobre ellas. Siete pilares de hormigón armado soportan las cargas del forjado superior. Se añadieron vigas de acero en I para soportar la cubierta y los balcones. Las losas del balcón y sus antepechos son de hormigón armado, pero no así las paredes. La estructura de hormigón y acero se rellenó con fábrica de ladrillo. Las paredes interiores también son de ladrillo, toda la fábrica de ladrillo, tanto en el exterior como en el interior, se revistió con mortero de cemento portland. La puerta y los marcos de las ventanas son de madera. El proyecto de la casa Rietveld desafía prácticamente cualquier tradición. Las tres fachadas visibles tienen igual importancia y recibieron la misma atención en su diseño. Cada una de ellas tiene una distribución asimétrica, tanto aisladamente como en relación a las demás, las fachadas presentan una alternancia armoniosa y rítmica de superficies abiertas y siegas. No da la impresión de que sean paredes macizas que se han perforado para permitir la entrada de luz y la ventilación, si lo que se muestra como composiciones de elementos planos que, alternativamente, son permeables o impermeables a la luz y al aire. En lugar de ajustarse a un único plano, los elementos rectangulares que conforman cada fachada se retranquean o sobresalen del plano implícito y sobrepasan también sus límites.

Los espacios interiores y exteriores fluyen suavemente entre si. La impresión general es que se trata de un objeto con gran plasticidad donde las líneas y los planos se superponen y deslizan unos sobre otros. La forma dislocada que Rietveld confirió a la casa fue un intento de expresar aquello que el consideraba como la esencia de la arquitectura, es decir, el espacio. En lugar de tratar el edificio como una caja cerrada que separa el exterior del interior, lo considero con relación a y como parte del espacio en su conjunto. En la Rietveld-Schroeder, el arquitecto consiguió llevar acabo su idea tanto desde el punto de vista materia como visual, y de una manera muy detallada. Se aprovecho cada posibilidad de crear una arquitectura abierta y extrovertida, el emplazamiento de la casa fue un aspecto importante del proyecto. La casa Rietveld Schroeder, ocupa el último solar del límite de la ciudad por el este. El terreno estaba un poco mas elevado que el polder del entorno, de modo que desde la cocina y la sala de estar se podía disfrutar de vistas sobre todos los prados y los árboles. El entorno se ha transformado desde entonces; la ciudad he crecido y en lugar de encontrarse ligeramente elevada actualmente la casa ha quedado hundida tras la pendiente del muro de contención de una autopista.

Los colores que se utilizaron en el interior y el exterior de la casa son uno de los elementos más sorprendentes. Ni la madera, ni la fábrica de ladrillos, ni al acero se dejaron sin pintar, y sólo se ven líneas y planos rojos, amarillos, azules, blancos, negros y grises. En el exterior, los elementos rectangulares de la fachada tienen un acabado blanco o de distintos tonos de gris, y tanto las puertas con sus marcos y los marcos de las ventanas, así como los elementos vistos de acero. Se pintaron de negro. El rojo, el amarillo y el azul se utilizan para resaltar ciertos elementos lineales, como las vigas en I y algunos marcos de puertas y ventanas. Como en el caso del mobiliario diseñado por Rietveld, donde la superficie natural de la madera se ocultaba totalmente, y los elementos estructurales se pintaban con un código de color de acuerdo a su función, en esta ocasión los elementos de límites se establecen mediante el color. En el interior los colores primarios también aparecen, en las superficies rectangulares. Rietveld varió los colores dependiendo del tamaño de la habitación, y del nivel de iluminación natural, y también para resaltar la imagen global. La transparencia y la naturaleza expansiva de todos los elementos característicos de la arquitectura de Rietveld en general, y de esta casa en particular. El proyecto llevó desde un principio el sello de Truus Schröder, quien planteó una seria de peticiones concretas. Por ejemplo, prefería una sala de estar en la primera planta en lugar de en la planta baja y que las habitaciones estuvieran agrupadas alrededor del vestíbulo.




MODIFICACIÓN DE LA CASA SCHRÖDER